Mis pequeñines

martes, 28 de agosto de 2012

Vuelve el pasado a mi mente...


*Suena el teléfono*

(Yo) + Hola.

(Él) - (Con voz seca) Hola.

+ ¿Qué pasa cielo?

- Nada, que para qué quieres que te llame?

+ No, nada, era para hablar contigo, para oír tu voz.

- Amm...

+ ¿Qué ocurre?

- Nada, que no quiero hablar.

+ Bueno, pues si quieres colgamos.

- Adiós. *Cuelga*

Me quedo mirando el teléfono. ¿Enserio me has colgado? No entiendo por qué estamos así. Me prometiste que no volveríamos a discutir, y otra vez estamos así.
¿Por qué no podemos hablar como personas civilizadas, tranquilamente, y comentando cosas sin importancia? No, tenemos que discutir. Y sigo pensando en hace varios años, cuando un personaje apareció en mi vida.
Al principio, como todo cuento feliz, era muy bonito, siempre me llamaba y me preguntaba que tal y esas cosas. Pero ya a los 3 meses me llamaba desesperando, no preguntándome, sino exigiéndome contestar el dónde estaba, con quién y a qué hora llegaría a casa. Y diréis ¿Pero esto qué es? Pues sí, pequeños lectores, eso era mi día a día y lo soportaba como podía, de tal modo me poseía, que me separaba de mis amigas. Si le decía que no podía quedar por lo que fuese, se enfadaba y me amenazaba que se suicidaría, pero así como lo leéis. Y así día tras día... Y llegó el verano.
Ese verano era increíble, ya que nos juntábamos con algunos de mi edad y tal, pero tooodas las noches era una de dos horas al teléfono por la noche, más una por la mañana y otra por la tarde. Mis amigos me decían "Nuria, que no es bueno que dependas de él" y yo nah, si es la tontería y tal... Sí, menuda tontería que después de enviarme vídeos de gente que se suicidaba y al rato decirme eso es lo que haré, me viene una tarde y me dice Te dejo.
Y no es todo, sino que a los tres meses o así me vino que dejase de decir "mierdas" sobre él y su pareja, con la que me puso el casco de vikinga, cuando yo no le nombraba siquiera en mis pensamientos. Osea, después de todo el mal que me hiciste, ¿pretendes que siga detrás tuya? No bonito, no.

Y esto me viene a la mente ahora, que soy feliz. Sí, quizá eso me marcó, porque hay que decir que ese chico encima era mayor de edad y nos lllevábamos seis años y tal... Pero yo aprendí que ya nadie me manda, y quizá me haya vuelto fría en algunos aspectos de una relación seria, porque quieras o no, eso te marca para toda la vida...

¡Oh! Me habla por tuenti mi chico. *Podemos hablar? -Claro

*Suena mi teléfono*

(Él) - Mi amor lo siento de verdad, no quería ponerme así... [...]

(Yo) + Nada cielo, que no pasa nada.

- Ya pero me jode que joe sé lo que te pasó hace tiempo y no quiero que vuelvas a vivirlo, me jode pensar que te trato mal, como un hijo puta...

+ Cielo, da igual, además, estaba pensando en eso...

- NO, por favor olvídate del pasado, sabes que ahora es un NOSOTROS, ¿comprendes?

+ Sí pero...

- No, Nuria, es que ¿Sabes qué problema ese?

+ Dime.

- Que él quizá te quiso, pero yo Te quise, te quiero y te querré.

No hay comentarios:

Publicar un comentario